pensar en el Dia Internacional de la mujer.


Siempre me ha parecido una tontería el poner temática a los días, aunque poco a poco me voy dando cuenta de que es la manera que han encontrado para recordarnos que no estamos solos en este mundo y que hay muchas cosas que se nos pasan por alto en nuestro día a día.


Hoy es el "Día internacional de la mujer", y aunque en un principio me pareciera otra forma de seguir discriminando "positivamente" al sexo que alguien pensó que era débil; por aquello de que los hombres no tienen su día; he llegado a la conclusión de que en realidad es otro tirón de orejas. 
Un tirón de orejas a la gente que no es consciente, de que a día de hoy, siguen existiendo diferencias por sexo.

El problema es que por tener un día propio, no conseguimos que los sueldo  sean iguales en ambos sexos, ni que les entre en la cabeza la idea de que en una familia las tareas están repartidas y que los hijos (con sus cuidados y enfermedades) también son cuidados por otras manos. Tampoco conseguimos que a una mujer en una entrevista de trabajo le dejen de preguntar si tiene pareja estable o tiene en mente quedarse embarazada; porque a la hora de la verdad, a la mujer se le miran dos perfiles, uno el de su CV y otro su ciclo de fertilidad.
Tampoco conseguimos que en otros países dejen de ser consideras esclavas, o meros objetos de decoración de una casa, ni que sean vendidas a otros hombres o enviadas o raptadas para ejercer la prostitución. Tampoco impedimos que se siga practicando la ablación femenina en África, ni que sean quemadas en las calles de la India .. podría seguir enumerando barbaridades sin sentido que se cometen tras muchos siglos de civilizaciones humanas, pero creo que es suficiente. El tener "un día" lo único que pretende es recordarnos que todavía queda mucho por la igualdad, y que todos debemos trabajar por conseguirla.

Cuando soy consciente de estas cosas, me doy cuenta de la suerte que tengo por haber nacido aquí. Por poder disfrutar de la libertad, con casi todas las letras. Por vivir en una sociedad que piensa que aunque somos diferentes (porque lo somos, y no pasa nada, y es maravilloso que seamos así), tenemos los mismos derechos y deberes. Porque puedo sentirme libre para pensar y creer en lo que quiera.

Por eso voy a brindar esta noche.
No por ser trabajadora (aunque sea una suerte el poder tener trabajo en estos tiempos), porque no es algo conmemorativo el cumplir con tu responsabilidad, seas hombre o mujer.


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