El otro día paseando por Malasaña encontré varios graffitis, de esos que me
gustan a mí: con mensaje.
Hubo uno que me llamó especialmente la atención justo cuando volvía a
casa en la calle Nao, en ese momento en el que se entrecruzan la
realidad y la oscuridad con el sueño y el alcohol. El graffiti, que adjunto en la entrada, decía:
"La sencillez que se obtiene como resultado de controlar la complejidad es la máxima sofisticación."
Steve Jobs
Cuando lo leí, pensé que era una frase perfecta para
justificar a aquellos que como yo, les gusta tener todo bajo control
para evitar imprevistos. No para evitar sorpresas, si no para ser previsores y evitar contratiempos.
Pero leyendo de quién provenía, un gran empresario, conocido por ser cofundador de Appel y Pixar, parecía indicar lo contrario.
Controlar la complejidad, no quiere decir entenderla, si no afrontarla.
Luchar con ella, para que cuando vengan los miedos y las dudas sepamos actuar en consecuencia.
¿Cuántas veces el miedo transforma lo fácil, o al menos lo que debería de serlo, en algo complejo y suficientemente complicado como para deshacernos de esas ideas innovadoras, o al menos arriesgadas?
Vivimos un tiempo, en el que debemos arriesgar. Luchar por aquello que parece que merece la pena, porque quizás lo que nos espera, no es ni más ni menos que algo mucho mejor que lo tenemos.
Los puntos de inflexión en una vida, ayudan a tener el valor de arriesgar lo conocido por aquello, que se puede llegar a conocer. Todo por una pregunta.
La calve está en:
preguntarnos o no preguntarnos,
respondernos, o dejar la pregunta abierta otra vez.
(Os recordamos que tenemos en Fb una página donde (casi) diariamente subimos fotos bajo el lema #detalles. Son fotos encontradas con mensaje. Pásate, dale a me gusta a la página y anímate a enviarnos tus #detallesen :) estamos deseando recogerlos.)
Pero leyendo de quién provenía, un gran empresario, conocido por ser cofundador de Appel y Pixar, parecía indicar lo contrario.
Controlar la complejidad, no quiere decir entenderla, si no afrontarla.
Luchar con ella, para que cuando vengan los miedos y las dudas sepamos actuar en consecuencia.
¿Cuántas veces el miedo transforma lo fácil, o al menos lo que debería de serlo, en algo complejo y suficientemente complicado como para deshacernos de esas ideas innovadoras, o al menos arriesgadas?
Vivimos un tiempo, en el que debemos arriesgar. Luchar por aquello que parece que merece la pena, porque quizás lo que nos espera, no es ni más ni menos que algo mucho mejor que lo tenemos.
Los puntos de inflexión en una vida, ayudan a tener el valor de arriesgar lo conocido por aquello, que se puede llegar a conocer. Todo por una pregunta.
La calve está en:
preguntarnos o no preguntarnos,
respondernos, o dejar la pregunta abierta otra vez.
(Os recordamos que tenemos en Fb una página donde (casi) diariamente subimos fotos bajo el lema #detalles. Son fotos encontradas con mensaje. Pásate, dale a me gusta a la página y anímate a enviarnos tus #detallesen :) estamos deseando recogerlos.)
Yo soy de los que prefiero que las preguntas no tengan respuesta. Y menos que nos las respondan otros por nosotros.
ResponderEliminarCuanto más mayor me hago, más ganas tengo de saber menos y de preguntarme más. Quizá esto lo entendí tarde y ahora tengo que desandar el camino.
¿Desde que presente se va al futuro pasado?
Cuídate.
yo me he dado cuenta de que cuanto más mayor soy, mas ganas de saber tengo. Entiendo más eso de :" solo se que no se nada", y lo mejor es que cada día tengo mas ganas de aprender!
EliminarEl miedo lo transforma todo y el intentar controlar nos puede volver locos. Mejor sin respuestas.
ResponderEliminarTampoco es eso vertigo. jajajaja
Eliminarque nos gusta el dramatismo jajaa
Arriesgar es más complejo cuantas más cosas tenemos que perder. Sin embargo no hacer nada también es, a menudo, arriesgado. Hay que saber cuándo hacerlo, y no siempre es fácil.
ResponderEliminar¿Preguntas sin respuesta, Ladrón? ¡Venga ya! Si no quieres una respuesta, ¿para qué haces la pregunta? Además, en muchas ocasiones una respuesta trae detrás más preguntas.
Un abrazo!
Quizás no se trata de preguntas sin respuesta, sino de preguntas cuya respuesta nos guardamos para nosotros mismos. A veces, querer sentar cátedra con cada respuesta es peligroso, pero no somos capaces de estar callados.
EliminarSiempre habrá preguntas, pero no siempre habrá respuestas.
A veces el silencio es la mejor de la respuestas. Y resuelve cualquier tipo de duda.
EliminarYo sinceramente, cada vez me gusta ser más clara y no dejar el tema a la libre interpretación.
Tambien tiendo un poco a compartir saberes ,por aquello de completar información y porque es mucho mas enriquecedor.
mientras haya preguntas, es que seguimos vivos.
Todo riesgo implica un miedo y el miedo a veces implica que no se corran riesgos. A veces pensamos que perderemos muchas cosas cuando a lo mejor es una idea equivocada. Quizás sea bueno pensar ¿qué puedo ganar?
ResponderEliminarUn abrazo.
cada día estoy mas convencida, de que pensar... mas que ayudar empeora las ideas... el tiempo justo es el mejor para clarificar ideas y ponerse en marcha, si no aparece el miedo y las dudas, y ya está todo perdido!
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