Pedía consejo en cafés compartidos, porque le gustaba saber como se equivocarían los demás, para después, tras barajar todas las posibilidades, poder errar por iniciativa propia.
A veces se piden consejos cuando ya sabemos perfectamente lo que vamos a hacer. No es más que una forma de reafirmarse en las convicciones de uno mismo o de por lo menos debatir el tema con alguien, que a veces libera.
Este tiempo, que a algunos les encanta llamar de "crisis", ha logrado hacernos creer, que estamos en un momento malo, que no hay futuro por el que luchar, que hay que seguir caminando con la cabeza agachada.
Yo me niego a creerlo, y me he propuesto demostrarlo.
Intento saborear la vida, buscar el lado bueno de las cosas y alegrarme con los pequeños detalles. En las entrevistas de trabajo digo que soy perfeccionista. Me gustan las palabras esdrújulas y los juegos de palabras. Cazabostezos profesional.
Me gustó mucho, mucho. Tienes razón en que la mayoría de consejos no son más que equivocaciones que otras personas cometerían si fueras tu.
ResponderEliminarCuídate.
A veces se piden consejos cuando ya sabemos perfectamente lo que vamos a hacer. No es más que una forma de reafirmarse en las convicciones de uno mismo o de por lo menos debatir el tema con alguien, que a veces libera.
ResponderEliminarAbrazos.
una vez leí en un libro de Jorge Bucay que "Quien elige el consejero, elige el consejo".
Eliminar:)
Gran libro y certera máxima la de Bucay.
ResponderEliminarY es que no hay mayor placer que arriesgarse y equivocarse por propia iniciativa.
Maravilloso texto :)
Equivocarse también es un arte.
ResponderEliminarUn abrazo!
Me gustan los consejos que me descolocan, que me hacen pensar... aunque siempre el error es mío...
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