despintar.



A veces me pregunto qué ocurriría si me saltara todas las normas y decidiera como Cupido quedarme dormida. 

Lo más cursioso de todo es que nadie le puede echar nada en cara, porque tras años de duro trabajo entre vagones de tren, en las intersecciones de calles transitadas, en el viento que agita un paraguas; en la "casualidad" que le gusta llamar a los mortales, su trabajo ha quedado reducido a nada.
Sus flechas aún haciendo efecto, y clavadas en la diana, no provocan nada más que pesar entre sus receptores. La valentía con que antes se enfrentaban los enamorados al amor, compitiendo contra molinos gigantes, matando a grandes dragones, luchando contra su propia familia; ha quedado reducida a un juego carnal, en el que cuando aparece el enamoramiento, uno de los dos intenta escapar por la puerta de atrás.

Mientras que el cobarde, huye impulsado por cada uno de sus miedos, los cuales como perros, alejan al amado de los brazos de su amante olisqueando el rastro de otra posible presa; el valiente, desprovisto de cualquier tipo de escudo, ropa o protección; se entrega sin medida a los brazos de quién con garrote en mano, avanza sin retorno hacia ninguna parte. El cual tras encontrarse desnudo, hundido y humillado ante quien consideraba el amor de su vida, se transforma sin quererlo, en un malvado guerrero huyendo sin gesticular, mirando a los ojos el dolor de quien se alejan, pero sin sentir absolutamente nada, del mismo modo que hicieron con él.

En este juego en el que todos nos hemos visto envueltos en algún momento, van desapareciendo Venus y regenerando Adonis, quienes cuando se encuentran comienzan a luchar entre sí, en duelos de los que muchos salen gravemente heridos.
Normal que haya colgado su arco y sus flechas Cupido.
Demasiada sangre para tan poco corazón.
Cuando el trabajo no es reconocido, cuando el trabajo es ninguneado o cuando el trabajo no trae frutos, mejor dejar de hacerlo.
Al fin y al cabo, el suyo, era y será un puesto para toda la vida y no sentirte útil en tu ámbito laboral quema a cualquiera.


Reto, despintando a Tiziano.
Club de las malas costumbres.


 

11 comentarios:

  1. Creo que cualquier cosa aparentemente inteligente que diga va a estropearlo todo así que sólo te parefrasearé "Normal que haya colgado su arco y sus flechas Cupido. Demasiada sangre para tan poco corazón".

    Amazing Catadora!

    Un besote grande :)

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    1. jaja
      cada dia me lees con mejores ojos. :)
      ¿y el tuyo? lo despintaste?

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  2. Pero no será también que él no ha tirado bien las flechas? a veces solo de en el blanco de una persona y la otra ni debe escapar del amor porque simplemente no lo siente. Sin duda le ha tocado un trabajo difícil al pobre... pero espero que retome sus andanzas, que despues de todo sin el no se puede vivir tampoco..

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  3. quizás sea que ya no hace bien su trabajo...¿habrá perdido cualidades?
    Yo creo que no es un tema de quien envia la flecha si no de quien la recibe, si está o cree estar preparado para afrontarla.
    Nos hemos vuelto poco valientes y más en el amor.
    Yo creo que aunque en esta ocusión le pillaron "descansando los ojos" y hecho una bolita, no deja de usar el arco.
    Ojalá tengamos suerte y de en diana :)

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  4. El del comentario anterior era yo haciendo el mongo, sorry. Así que este es el texto de su propio reto ¿eh? qué interesante.

    No me extraña que Cupido haya decidido jubilar el arco, cada vez nos choteamos más de él, pero es que con 30 años ya cumplidos que siga yendo en pañales es para mofarse un poco. La culpa la tiene El Corte Inglés.

    Tal vez, con el paso de las generaciones, vamos siendo más cobardes y nos escudamos en el "es que los tiempos han cambiado" no lo sé... o puede que nos venzan las ansias carnales y las confundamos con el amor, aunque queramos engañarnos con lo contrario.

    En fin. Vengo yo algo difuso hoy.

    Salud y abrazos.

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    1. ...creoi que usted ha dado en el clavo. quizas la clave simplemente sea, espacio y tiempo. :)
      Las flechas son de actuación instantanea pero que hay que dejar que hbgan efecto. :)

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  5. No podemos culparle. No hay nada más descorazonador que ver cómo desprestigian tu trabajo de esa forma.
    ¿Y nosotros? Si somos valientes, nos arriesgamos a que un cobarde vuelva a desgarrarnos otra vez. Si somos cobardes, no volveremos a enamorarnos.

    Un abrazo!

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    1. ....Guille, siempre con tus dobles sentidos. Quizás lo mejor sea dormirse y tener un sueño una noche de verano, mientras los días se llevan los mejores partidos. ;)

      (ese no es mi plan, luchar es la unica opción. Mejor herida tras luchas que intacta sin vivir)

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  6. A ver si el resto de retados se anima a terminar el reto y podemos enviarlo completo, jeje. Tu relato me encanta, además, eres la culpable de que, por lo menos yo, haya acariciado durante unos instantes la pintura.

    Cuídate.

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    1. El Sombrerero hace mucho que no actua ... y no se revela contra los desobedientes de plazos y entregas. ;)

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  7. Me ha encantado :)

    Te he compartido el mi página de Facebook, señorita.

    ;)

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